25/11/2020
La alcaldesa, PIlar Díaz, acompañada de otros miembros de la Corporación, ha hecho lectura este miércoles 25 de noviembre, Día Internacional contra la Violencia Machista, de la declaración institucional que se leyó también en el último Pleno municipal. A continuación, se ha descubierto la placa de recuerdo a las víctimas que se ha instalado junto a la escultura Alba –en la calle Laureà MIró con avenida Cornellà, a pocos metros del Ayuntamiento–, que representa a una mujer y es obra de Eulàlia Fàbregas.
DECLARACIÓN INSTITUCIONAL DEL AYUNTAMIENTO DE ESPLUGUES DE LLOBREGAT CON MOTIVO DEL DÍA INTERNACIONAL PARA LA ELIMINACIÓN DE LA VIOLENCIA HACIA LAS MUJERES – 25N 2020
Esplugues dice lo suficiente. Después de un 2020 tan impresionante, con el asesinato de Mónica, Ciara y Pepi, nos conjuramos para hacer frente común sin fisuras contra la violencia machista. Tampoco olvidemos a Flori, asesinada por el machismo criminal en 2016. Ni una más, ni una menos. El dolor y la rabia de ver cómo nos arrebataban nuestras vecinas por el mero hecho de ser mujeres empujan nuestra determinación a iniciar una campaña de sensibilización que va mucho más allá del Día Internacional contra la Violencia Machista, y que implica todas las áreas de Ayuntamiento y la sociedad civil espluguina en su conjunto. En este sentido, renovamos nuestro compromiso de luchar contra las violencias hacia las mujeres coordinando acciones con el resto de administraciones y organismos corresponsables. Y hoy, 25-N, nos adherimos como cada año al manifiesto unitario.
Este año, hace 60 años fueron asesinadas las hermanas Mirabal, tres activistas políticas y miembros activas de la resistencia. En honor a ellas se estableció esa fecha como Día internacional para la eliminación de la violencia hacia las mujeres. Desde entonces, no han cesado los esfuerzos de movimientos sociales, feministas y de todos los ámbitos para erradicar las violencias machistas. También es cierto que ya hace unos años que varias iniciativas populares anuncian que el tiempo se ha agotado para los agresores machistas, #NoEstàsSola, #Metoo y #YoSiTeCreo. El reto es enorme: se trata de cambiar a la sociedad y destruir el poder patriarcal.
Es evidente que, aún ahora, los tiempos siguen cambiando y que el rechazo social contra las violencias machistas es cada vez más fuerte. No cabe duda de que la defensa de los derechos humanos más fundamentales está ganando paulatinamente esta partida. Por eso, no hay que perder el horizonte que todavía está por llegar mientras tenemos en cuenta el camino que ya hemos caminado. Es necesario fortalecer la estrategia y el compromiso común para erradicar todas las formas de violencia machista. Las que se producen en el ámbito de la pareja y ex pareja o en el ámbito familiar, y que durante muchos años se han considerado un problema privado, pero también aquellas que se producen en el ámbito laboral o social y comunitario, y que han sido tradicionalmente menos visibilizadas, como el acoso sexual o por razón de sexo, los matrimonios forzados o el tráfico de niñas y mujeres con fines de explotación sexual u otros.
A menudo, se nos pregunta “¿qué puedo hacer yo para cambiar todo lo que no me gusta?” y, afortunadamente, las personas que se lo preguntan han tomado partido para erradicar las violencias machistas. Seguramente, nunca antes hubo una implicación tan extensa y consciente respecto a la violencia machista. Y es que los últimos meses han sido absolutamente duros para las mujeres y niños que viven en situaciones de violencia como, seguramente, lo serán los meses que vendrán, mientras dure la pandemia.
Los agresores adaptan la violencia abriendo grietas nuevas para seguir avanzando, adaptándose a las circunstancias. El confinamiento nos ha demostrado que quien quería ejercer el control sobre mujeres y niñas lo ha tenido más fácil que nunca. De hecho, los agresores necesitaron emplear mucha menos fuerza que la habitual para seguir manteniendo sus deseos y privilegios. El aislamiento y el incremento de la violencia psicológica ha sido frecuente en contextos en los que se ha reducido la red social y la actividad habitual de las mujeres por las restricciones de movimientos, la reducción de la interacción social o el aumento del teletrabajo. Se han producido situaciones de acoso sexual a cambio de recursos económicos o alojamiento cuando las mujeres han tenido pérdida de ingresos y por tanto dificultades económicas para seguir adelante. Se han producido agresiones sexuales en entornos de ocio informales en los que no existen personas profesionales formadas en materia de violencias sexuales. También en el mundo virtual, el incremento de las violencias online está afectando a muchas mujeres y niñas hasta el punto de poner en riesgo su propia vida. Las ciberviolencias, como el control o el acoso a través de aplicaciones y redes sociales o el sexpreading, han tomado relevancia en la situación de confinamiento y han permitido a los agresores controlar y asediar a sus víctimas, mujeres, jóvenes y niñas, sin necesidad de convivir con ellas.
Pero cuando la violencia se adapta a las nuevas situaciones, también lo hacen las formas de resistir de sus víctimas. Muchas veces tendemos a pensar, equivocadamente, que las víctimas son seres pasivos y resignados en su situación y desconocemos que, constantemente, están elaborando y readaptando las formas en las que se mantienen en vida. La pandemia nos ha cambiado la vida y, durante un tiempo, también nos ha quitado la vida pública y muchas de esas cosas que nos mantenían a las personas felices y seguras. Hemos comprobado que, para muchas, estar en casa no es sinónimo de paz sino de miedo y violencia.
Quizás, ese es el año en el que hemos aprendido más que nunca que lo que nos habían enseñado no era cierto y, contrariamente a lo que creíamos, el lugar más seguro para las mujeres y las niñas puede ser la calle, las plazas, los lugares en los que hacemos vida, mientras que el hogar, la proximidad, lo que nos habían enseñado como refugio, puede ser el espacio más peligroso para nosotros.
Las casas podrían haber actuado como bunker donde el objetivo de los agresores era tener el control sobre la víctima, tener poder sobre ella, si no hubiera sido por las múltiples campañas sociales e institucionales que se han puesto en marcha para poner freno a las violencias.
Cuando hemos vuelto a tomar las calles y nuestros lugares, los machistas han visto que perdían ese poder. Por eso, los mayores episodios de violencias han sido, precisamente, cuando se ha producido el desconfinamiento.
El número de llamadas y cuidados se han visto incrementados en cifras tristemente históricas. Desde el conjunto de administraciones manifestamos nuestro firme compromiso en seguir trabajando para desarrollar políticas públicas para poner fin a todas las violencias machistas y para garantizar la atención, la recuperación y la reparación de las supervivientes.
Por eso no nos sabemos estar de hacer un reconocimiento a todas aquellas personas que han superado lo de: “son cosas de pareja” y han descolgado el teléfono, ya todas las asociaciones, entidades y grupos feministas del país que han puesto sobre la mesa l emergencia de encontrar soluciones en estos momentos tan difíciles. Necesitamos más que nunca un compromiso unitario de la sociedad y las administraciones para garantizar la vida digna de las mujeres y las niñas.
Viviendo con normalidad, los compañeros y compañeras de trabajo, las amistades, las personas con las que compartimos actividades diversas… se convierten en vigilantes informales del bienestar. Compartimos preocupaciones, sensaciones, observamos los cambios y, por eso, cuidamos. Cuando todo esto se ha visto impedido, ha sido más importante que nunca que todo el mundo diera un paso adelante para denunciar las violencias machistas en todos sus ámbitos y formas.
Nos dirigimos a todas aquellas mujeres que han resistido a la violencia y han buscado el momento idóneo para contárselo a terceras personas; también a las que no podían y su vecindario alertó sobre la situación que sufrían, a las que pudieron escapar. Nos dirigimos, sobre todo, a las que, en una época tan incierta como la presente, todavía permanecen en las casas donde se encuentra su victimario.
Finalmente, nos dirigimos a los hombres que está en contra de estas violencias y sabe que uno de sus amigos, familiares, conocidos las ejercen: es hora de que se hagan responsables e intervengan. Por último: en los agresores, un recordatorio: no habrá espacio para la impunidad.
Las violencias machistas sólo se pueden eliminar desde la raíz, se tú también cómplice en la construcción de este mundo mejor.
Esplugues de Llobregat, 18/11/2020
4/11/2020
Hacemos frente común a la violencia machista. Es el nombre de la campaña que el Ayuntamiento de Esplugues estrenará este año con motivo del Día Internacional contra la Violencia Machista (25 de noviembre), pero que quiere ir más allá en la lucha contra esta lacra social, que sólo en Esplugues se ha cobrado este año la vida de tres personas (una mujer de 28 años y su hija de 3, en enero, y una mujer de 51 años, en mayo).
La nueva campaña no pretende centrarse sólo en el rechazo durante unos días de la violencia hacia las mujeres y los comportamientos machistas. La alcaldesa de Esplugues, Pilar Díaz, destaca que “más allá de los gestos simbólicos, nos conjuramos como ciudad los 365 días del año para reconocer al machismo, para cerrar filas contra las situaciones abusivas cuando las tengamos delante y por dar calor a las víctimas para que dejen de serlo”. Se trata de aplicar medidas continuadas en el tiempo y que quieren implicar a toda la ciudadanía, desde las entidades culturales y deportivas hasta el tejido comercial y los centros educativos:
COMERCIO
El Ayuntamiento impulsará la adhesión de los establecimientos comerciales a la campaña, que incluirá la colocación de pegatinas en las entradas que indiquen el rechazo a la violencia machista y que el establecimiento es un espacio seguro. También se trabajará para que bares, cafeterías y restaurantes luzcan la imagen y el lema de la campaña en elementos de uso diario como mantel y posavasos.
EDUCACIÓN
La campaña llegará a los institutos con contenidos adaptados al alumnado joven. Se reforzarán los talleres y las sesiones formativas sobre violencia machista, sexismo y relaciones afectivosexuales, entre otros, y se realizarán exposiciones itinerantes en los centros de secundaria.
DEPORTES
Se adaptará la campaña en el mundo del deporte, que tradicionalmente ha sufrido un despreciamiento de la presencia de chicas y mujeres. Se realizarán talleres dirigidos a las entidades, se promoverán partidos y exhibiciones contra la violencia machista y se difundirán mensajes en los lavabos de los centros deportivos alusivos a la campaña.
CULTURA
El mundo de las asociaciones culturales y tradicionales dispondrá también de su adaptación de la campaña. Se realizarán actos de divulgación a través de la cultura, así como talleres dirigidos a las entidades.
Este año, con motivo de la pandemia de Covid-19, se ha habilitado el teléfono 646 863 435 , para las mujeres de Esplugues en riesgo de violencia machista, de lunes a viernes de 9 a 19 h. Hasta mediados de octubre ha habido una veintena de llamadas.
También se puede llamar al 900 900 120 , teléfono de atención las 24 horas del Instituto Catalán de las Mujeres (no deja rastro en la factura), a la Policía Local de Esplugues ( 933 71 66 66 ) ya Emergencias ( 112 ).
Un 25-N especial
La pandemia hace imposible que este año se repita la marcha comarcal, que en Esplugues reúne cada año a cientos de personas, con motivo del Día Internacional contra la Violencia Machista (25N). Pero el Ayuntamiento no quiere que esta fecha, que permite visibilizar una realidad cruda para muchas mujeres, que a menudo lo viven en silencio, pase desapercibida.
Por eso, ha programado diferentes acciones:
– MARCHA VIRTUAL: ‘Hagamos kilómetros contra la violencia machista’. A través de las redes sociales municipales se invita a la ciudadanía a hacer kilómetros contra la violencia machista. Se activará un contador, previsiblemente a partir de la segunda semana de noviembre, se pide a las personas que cuelguen fotos en sus redes, indicando los kilómetros realizados, y etiqueten el Ayuntamiento @ajesplugues y pongan el hashtag #EspluguesDiuProu. Se irá actualizando el marcador con los kilómetros conseguidos.
El Ayuntamiento obsequiará a las personas participantes con una mascarilla especialmente diseñada para la campaña (hasta agotar existencias). Será necesario mostrar la participación con la imagen de la publicación.
-EXPRESIÓN DE RECHAZO A LOS BALCONES . Se invita a la ciudadanía a colgar un pañuelo lila –que podrán ir a recoger de forma gratuita a la casa consistorial a partir del 2 de noviembre-, hasta agotar existencias– en balcones y ventanas el 25 de noviembre. Y a salir al balcón a las 19 horas de ese día para hacer un minuto de silencio.
– ILUMINACIÓN LILA Y PLACA DE HOMENAJE A LAS VÍCTIMAS . La fachada del Ayuntamiento y la estatua Alba (en la confluencia de la calle Laureà Miró y avenida Cornellà) se iluminarán de lila la noche del día 25. Además, se instalará una placa de recuerdo a las víctimas junto a la escultura, que representa a una mujer y es obra de Eulàlia Fàbregas.
-YOUTUBE DEL CONSEJO COMARCAL DEL BAIX LLOBREGAT . El lunes 30 de noviembre, a las 11.30 h, se emitirá por streaming el monólogo ‘No solo duelen los golpes’, de Pamela Palenciano.